El Barça se llevó un más que trabajado triunfo de su visita Ciutat de València. Tras mostrarse un tanto errático en ataque en un primer tiempo en el que el Levante se las arregló para marcharse al descanso con goles de Iván Romero y José Luis Morales, tras penalti concedido a instancias del VAR, logró reponerse en los primeros minutos de la segunda parte gracias un precioso disparo de Pedri, siempre imprescindible en la medular azulgrana, y un zarpazo tras córner de un Ferran Torres que erró en los primeros 45 minutos.
Pese a la premura de su igualada y sus redobladas ganas por llevarse otra vez los tres puntos, los de Hansi Flick tendrían que esperar hasta una desafortunada acción de Elgezabal, en su intento por despejar un centro de Lamine Yamal, para hacerse finalmente con los tres puntos cuando el partido ya moría y permitir que los barcelonistas sumen así su segundo triunfo consecutivo.
El Barça, de hecho, se había ido al descanso con el partido terriblemente cuesta arriba. Morales, en el añadido y después de que José Hernández Hernández señalara penalti por mano de Balde a instancias del VAR, se encargó de convertir un 2-0 que desataba la euforia en el Ciutat de València.
Mucho antes, al filo del primer cuarto hora del duelo, Iván Romero se había encargado de poner el 1-0 en el luminoso, aprovechando una acción en la que los locales lograron romper la sempiterna táctica del fuera de juego de Flick y deshacerse con mucha calidad de Cubarsí y Araujo dentro del área de Joan García.
Los azulgrana, que contaron con la presencia como titulares tanto de Casadó, como relevo de Frenkie de Jong, y Marcus Rashford, con lo que Raphinha se situó como mediapunta, habían intentado hasta el segundo mazazo irse por lo menos al descanso con la igualada en el marcador, pero a sus llegadas les faltó casi siempre algo de mordiente.
Lamine Yamal, de nuevo, intentó hacer diabluras en la banda, pero sus acciones, muchas veces más que vistosas, no encontraron una finalización acertada y, además, Manu Sánchez se las arregló una y otra vez también para ganarle la partida en sus intentos por buscarle las cosquillas a la zaga granota.
Los disparos de los azulgrana prácticamente nunca llegaron a amenazar seriamente la portería de un Pablo Campos que apenas tenía que emplearse a fondo para hacerse con el esférico. Con dos excepciones. La primera, en una internada de Marcus Rashford en la que tuvo que desbaratar el duro disparo del inglés, quien trató de marcar con muy poco ángulo. En la más clara para los visitantes, eso sí, no tuvo que intervenir para evitar que el balón besara la red.
Ferran Torres, titular en punta en detrimento del ya recuperado Lewandowski, tras una perfecta asistencia de Pedri, envió el esférico al travesaño cuando lo tenía casi todo a favor para poner el 1-1 en el luminoso.
Flick buscó corregir las cosas moviendo el banquillo en la reanudación y dando entrada a Dani Olmo y Gavi por sus dos novedades en el equipo titular, Rashford y Casadó. Con esos mimbres, el Barça arrancó la segunda parte buscando con ahinco la portería rival y arriesgando de nuevo atrás, confiando en las buenas prestaciones bajo palos de Joan García y el fuera de juego. Lamine Yamal avisó pronto, con un disparo que Pablo Campos rechazó como pudo.
Nada pudo hacer el arquero, eso sí, para evitar que Pedri, con un disparo cargado de efecto desde fuera del área, recortara distancias con el 2-1. Cinco minutos después, a la salida de un córner, Ferran se resarciría de su error en el primer tiempo con el 2-2. El Levante, lejos de amilanarse, tuvo sus opciones para volver a escaparse en el marcador. El técnico azulgrana, a un cuarto de hora de cumplirse el tiempo reglamentario, se la jugó pasando a defensa de tres y dio entrada a Lewandowski.
La tuvo Raphinha, con un disparo envenenado tras tocar en un defensa perfectamente respondido por el portero local. Tampoco nada podría hacer para evitar que Elgezabal, tratando de despejar un centro del de Rocafonda, pusiera el definitivo 2-3 en el luminoso.