“Al Gobierno central no le pediría una mayor colaboración. Le pediría alguna colaboración”. Fueron las primeras palabras que pronunció Alberto Núñez Feijóo cuando visitó Valencia el 31 de octubre de 2024, tras las riadas que provocaron 228 muertos. Ese día, el líder del PP puso en marcha una estrategia para culpar al Gobierno central de la tragedia y lavar la imagen del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, quien pasó la tarde de la DANA en un restaurante con una periodista y luego en paradero desconocido. Menos de un año después y ante una de las mayores oleadas de incendios forestales registradas, el primer partido de la oposición replica el método: señalar a los demás para eximir de responsabilidad a los suyos.
Lo hizo este lunes la portavoz parlamentaria del PP, Ester Muñoz, quien acusó al Gobierno central de no poner todos sus medios a disposición de los ejecutivos autonómicos, responsables tanto de las labores de prevención como de apagado de los incendios. “No se están atendiendo las peticiones de que más efectivos de las Fuerzas Armadas se incorporen a través de la UME”, denunció Muñoz, quien también culpó al Gobierno de no acceder a hidroaviones rusos, con mayor capacidad de transporte de agua. La UE ha establecido un embargo a Rusia por la invasión de Ucrania.
En la misma rueda de prensa, Muñoz aseguró que las comunidades han desplegado el 100% de sus medios antiincendios. Pero también el Gobierno central. La portavoz reconoció además que la Unidad Militar de Emergencia está completamente desplegada, así como las BRIF. Incluso asumió que ninguna unidad militar más está preparada para atacar incendios como los de las últimas semanas. Aun así, se preguntó: “¿Por qué no hay más medios? ¿Por qué no se atiende a las peticiones de las comunidades?”.
Feijóo ya lo hizo con palabras muy similares en 2024 a cuenta de la DANA, cuando dijo que los presidentes autonómicos “no tienen todas las herramientas” para hacer frente a sus propias competencias.
Algo similar a lo que ocurre ahora con los incendios, según la tesis del PP. “Se pueden dedicar muchos recursos a prevenir”, dijo Muñoz. “Lo que es difícil es averiguar que va a haber gente prendiendo mecha a todo nuestro territorio”, planteó. Muñoz aseguró que hay “grupos de jóvenes que queman por diversión”, lo que hace imposible anticiparse.
Muñoz también atacó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por proponer un pacto de Estado contra las consecuencias del cambio climático, aunque sí exigió un pacto de Estado para mejorar la financiación de las comunidades autónomas.
Con todo, ni los presidentes autonómicos ni el PP se plantean pedir el nivel 3 de emergencia, lo que obligaría al Gobierno central a asumir todas las competencias y centralizar las tareas de extinción. En Castilla y León y Andalucía, Alfonso Fernández Mañueco y Juan Manuel Moreno, respectivamente, afrontan elecciones en los próximos meses. María Guardiola gobierna en minoría y con los presupuestos prorrogados, mientras Alfonso Rueda tiene en Galicia el camino más despejado y su horizonte electoral se va a 2028.
El Gobierno defiende el despliegue
Desde el Gobierno, mientras, exigen al PP que deje de utilizar políticamente una crisis sin precedentes en la lucha contra el fuego. Tras la invitación de Pedro Sánchez este domingo al conjunto de fuerzas políticas para alcanzar un pacto de estado frente a los efectos del cambio climático, varias voces del Ejecutivo reprocharon este lunes a los populares que no duden en articular una estrategia de confrontación mientras España arde.
“El único camino contra los fuegos tan extraordinarios que vivimos es usar hasta el último recurso disponible del Estado y de la UE. Aunque hacerlo una semana después es tarde, cabe dar la bienvenida a la rectificación del Gobierno y pedir que se concrete”, dejó escrito el domingo Feijóo en su cuenta de Twitter. Unas declaraciones que no han gustado en el Ejecutivo.
“Las de Feijóo son unas declaraciones irresponsables. Lo que tienen que hacer es arrimar el hombro”, dijo el ministro Óscar López, que exigió además a los presidentes autonómicos que asuman su responsabilidad y no escurran el bulto de la gestión. “Las comunidades autónomas son Estado. Y los presidentes autonómicos no son comentaristas ni tertulianos, son presidentes que tienen obligaciones y que tienen competencias. Y toda España sabe que las comunidades autónomas tienen competencias en la prevención y en la extinción”, apuntó.
En la misma línea se expresó también la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, que comparó la actitud de los presidentes autonómicos populares con la de Carlos Mazón en la gestión de la DANA. “El PP echa balones fuera y no asume su responsabilidad. Cuando vienen mal dadas, como en Valencia o ahora con el fuego, se inhiben de sus propias responsabilidades e intentan culpar al Gobierno de España. Y es una irresponsabilidad. Primero, porque las competencias residen en las Comunidades. Y segundo, porque los ciudadanos no entienden que cuando viene el agua o el fuego algunos se dediquen a confrontar y a no intentar atajar la crisis”, dijo Montero.
Lo que sostienen en la Moncloa es que es “un bulo” que el Gobierno no haya puesto a disposición de las Comunidades todos los recursos disponibles desde el primer día. “Todos los medios disponibles del Estado están al servicio de las Comunidades Autónomas. Y son las Comunidades Autónomas, en el marco de sus competencias, las que tienen que decidir que el mando pase al Gobierno de España si consideran que no pueden ejercer el control”, incidió Montero.
También los socialistas afearon este lunes las palabras de la portavoz del PP, Ester Muñoz, en las que acusó sin pruebas a “grupos de jóvenes” de estar detrás de los incendios “por diversión”. Las Juventudes Socialistas calificaron esas declaraciones como una “vergüenza” y exigieron una rectificación. “Juventudes Socialistas exige al Partido Popular una rectificación tras las declaraciones de su portavoz, criminalizando a la juventud por los incendios. Los jóvenes no queman bosques por diversión, están al pie de cañón combatiendo el fuego”.
El Gobierno detalla que los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias se encuentran desplegados al 100%: más de 1.400 militares en ataque directo desplegados; hasta 2.000 en misiones de apoyo y relevo, y 450 medios (maquinaria, drones, etc). Del Ejército del Aire hay movilizado personal especializado en apoyo a hidroaviones (5 pilotos para descargas de agua, mecánicos y copilotos). Del Ejército de Tierra, 500 militares activados, 25 analistas y personal de apoyo activado las 24 horas. De la Armada, 100 militares operando para apoyo logístico a los evacuados. Además, según los datos del Ejecutivo el batallón de helicópteros cuenta con 150 efectivos movilizados.
Pero no solo el ministerio de Defensa aporta personal y medios, según el inventario de Moncloa. Desde el ministerio para la Transición Ecológica se han puesto a disposición de las Comunidades Autónomas 56 medios aéreos desplegados, diez brigadas helitransportadas con 640 bomberos forestales, cuatro equipos de prevención integral y siete Unidades Móviles de Análisis y Planificación
Además, desde el Ministerio del Interior se añaden más de 5.000 agentes de Guardia Civil movilizados, 350 efectivos de Policía Nacional y más de 200 efectivos de Protección Civil. El Gobierno asegura, por otra parte, que España ya recibe el mayor contingente de ayuda internacional de la historia con cuatro aviones, cuatro helicópteros, cuatro equipos de bomberos y 190 efectivos procedentes de Francia, Italia, Países Bajos, Eslovaquia, República Checa, Alemania y Finlandia.