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Granollers salva tres bolas de partido junto a Zeballos para ganar su segundo Grand Slam

Nueva York se convirtió en Gotham. Una tormenta lo ennegreció todo y así seguirá hasta la final masculina entre Jannik Sinner y Carlos Alcaraz de este domingo, pero para entonces Marcel Granollers ya estaba celebrando. Su segundo Grand Slam en dobles, su primer US Open tras el reciente título en Roland Garros. Junto a su compañero, el argentino Horacio Zeballos, fueron dos supervivientes: antes de esquivar la intensa lluvia ya habían evitado varias veces la derrota. Al final vencieron (3-6, 7-6 [4], 7-5) en dos horas y 24 minutos de juego.

Ante la pareja formada por Joe Salisbury y Neal Skupski, los mismos a los que se impusieron en París, revivieron en dos ocasiones. Después de ceder el primer set con una doble falta dolorosa de Granollers, llegaron al tie-break del segundo y allí empezaron con desventaja. Los británicos eran inaccesibles con su saque y todo parecía perdido. Superar un mini tie-break ante tanta potencia se antojaba imposible. Pero encontraron la manera de forzar el tercer set y seguir adelante.

Entonces llegó el segundo milagro. Con 4-5 y 0-40 en contra, es decir, con tres bolas de partido para Salisbury y Skupski, nuevamente el dúo hispano-argentino estuvo frente al abismo de la derrota y nuevamente se rehizo. Al final, de hecho, salvar esos match balls les dio la confianza suficiente como para romper el servicio de sus adversarios y hacerse con la final y el título.

Celebración de Alcaraz

En las gradas de la pista Arthur Ashe, a horas de la final femenina entre Aryna Sabalenka y Amanda Anisimova, apenas había nadie, pero en los pasillos del recinto Alcaraz celebraba tras su entrenamiento el éxito de su compatriota.

El mérito de Granollers fue doble porque su participación en el mismo US Open estuvo en duda hasta el último minuto. A sus 39 años, una fractura en el pie en las semifinales de Wimbledon le había impedido realizar una preparación adecuada. Después de muchos años de trabajo y de varias finales perdidas, el español está encontrando este año la recompensa junto a Zeballos.