Los ingenieros ucranianos han sacado a relucir el súper motor a reacción pulsante que se puede utilizar para mejorar sus vehículos aéreos ligeros no tripulados. En concreto, se trata de unas muestras que han sido presentadas por los trabajadores de la Oficina de Diseño Independiente.
Todavía está en vías de desarrollo y están haciendo pruebas en estos drones militares en tierra. Uno de los trabajadores ha explicado al medio Militarnyi en un evento del pasado 3 de diciembre que ya están dando pasos adelante.
Este motor, el Hrim-17, es capaz de adaptarse a este tipo de vehículos aéreos no tripulados porque tiene unas medidas muy compactas. 940 milímetros de largo, por 100 milímetros de diámetro y un peso que no llega ni a los dos kilos.
Para que este motor pueda estar operativo, se utiliza como combustible la gasolina F100. Su consumo es de unos 6,3 litros de combustible por hora, casi como un coche, aunque con una temperatura de la carrocería que puede llegar a los 800 grados.
Su autonomía es de unos 15 minutos y puede llegar a sobrevolar una trayectoria de hasta 100 kilómetros. Pero estos son los datos de los análisis previos. Las pruebas finales serán las que decidan. La velocidad a la que esperan que se mueva es a 450 kilómetros por hora.
El kit básico de este motor Hrim-17 está compuesto por una válvula de lanzamiento, un sistema automático de combustible y también un sistema de encendido terrestre para poder mejorar las operaciones de sus drones.
Hace unas semanas, Kiev se quedó a oscuras por un ataque ruso. En concreto, fue un ataque aéreo con drones que dejó sin electricidad a cerca de medio millón de personas de la capital ucraniana. En el bombardeo ruso, murieron dos personas y otras 20 resultaron heridas, en una «noche difícil».
