Omar El Hilali (L’Hospitalet de Llobregat, 2023) es un jugador clave en el entramado defensivo de un Espanyol que llega ahora al Bernabéu con unas sensaciones mucho más positivas que las que tenía a estas alturas del curso el año pasado. Es tercero en la tabla, empatado a puntos con el Barça, y tratará de dar el golpe aunque sea sin Pere Milla, sancionado por una desconsideración contra Hernández Hernández, árbitro del duelo ante el Mallorca. «A los árbitros hay que dejarlos tranquilos», admite El Hilali en conversación con EL MUNDO.
- El arranque de temporada está siendo muy diferente con respecto a la pasada. ¿Cuáles son las claves de este cambio?
- Sinceramente, yo creo que es por la mentalidad y porque el equipo ha dado un paso adelante tanto a nivel de juego como en la forma de competir. Por eso estamos donde estamos ahora mismo.
- ¿El espíritu de lucha mostrado ante el Mallorca es el camino a seguir?
- No queda otra. Habrá partidos en los que no nos van a salir las cosas y, al final, tienes que sacarlo adelante, sea como sea. Como se dice siempre, si no puedes ganar, por lo menos no pierdas.
- ¿Cómo valora la aportación de Dmitrovic? ¿Lo tenía más difícil por llegar como recambio de Joan García?
- Es normal, que cuando se fue Joan, que ya sabemos el nivel que tiene, tuviera un poco la etiqueta de de hacer lo que hacía él, pero las cosas no van así. Dmitrovic está haciendo su trabajo, lo está haciendo muy bien, se ha adaptado muy bien a las peculiaridades de nuestro juego y esperamos que siga en esta línea, porque también nos está dando puntos.
- ¿Este buen arranque les hace ser optimistas con la visita al Bernabéu?
- Al Bernabéu vamos a ir a ganar, nada de ir a verlas venir o buscar el empate. Eso no entra en nuestra cabeza, tenemos que ir a por el partido y, a partir de ahí, sabemos que pueden ocurrir muchas cosas, pero por nuestra mentalidad no pasa otra cosa que no sea ir a ganar.
- El año pasado el equipo llegó 0-0 al descanso e incluso logró adelantarse, pero al final cayó por por 4-1. ¿Eso les hace llegar con un cierto ánimo de revancha o es mejor centrarse en el presente?
- Al final, el pasado es pasado, no puedes cambiarlo. No tiene nada que ver. Ellos, además, también son un equipo muy diferente, tienen un estilo de juego que ha cambiado con respecto al año pasado y nosotros trataremos de hacerles daño con nuestras armas, sin pensar para nada en el año pasado.
- A nivel defensivo, ¿cuáles pueden ser las claves para frenar un ataque con nombres como los de Mbappé, Vinicius, Rodrygo o Mastantuono?
- Se trata sobre todo de analizarlos bien, sabiendo que son grandes jugadores, y afrontar el partido con ganas de hacerlo bien, buscar minimizar sus cualidades y bueno, también tener un poco el día, que a veces eso también ayuda…
- ¿Qué debe hacer el Espanyol para sumar puntos en un campo como ese?
- Tenemos que estar dentro del partido el máximo tiempo posible. Y pensar que, aunque nos metan un gol, siempre hay opciones de remontar, como ya lo hicimos en casa contra el Atlético. Esto es fútbol y las cosas pueden cambiar muy rápido. Si marcan, no podemos pegar un bajón, porque entonces sí que podría ser un gran baile y nos podrían caer muchos más.
- Este año hay varias novedades en su equipo. ¿Qué fichajes le han sorprendido más gratamente?
- Todos tienen un gran nivel, pero por los minutos que ha venido teniendo, creo que el que está más de moda ahora mismo es Dolan. Está a un nivel increíble, lo tengo en mi banda y me entiendo muy bien con él. A medida que el resto vaya cogiendo las costumbres del equipo y adaptándose, estoy convencido de que también lo harán muy bien.
- Desafortunadamente, no podrán contar con Pere Milla, expulsado en el partido frente al Mallorca. ¿Qué les comentó dentro del vestuario?
- Nos pidió disculpas y creo que él mismo ha reconocido, que se equivocó y que no puede volver a pasar, porque al final dejas al equipo con 10. Pero bueno, eso ya es parte del pasado, ya pidió perdón y ganamos, que era lo importante.
- La temporada pasada se sintieron perjudicados por varias decisiones arbitrales y el club, incluso, llegó a protestar formalmente por ello. ¿Han cambiado las cosas o cree que aún hay margen de mejora en este sentido?
- Sinceramente, pienso que a los árbitros hay que dejarlos tranquilos, que hagan su trabajo. Se pueden equivocar, son personas, y unas veces se equivocarán para bien y otras para mal. Los jugadores también nos equivocamos en muchas cosas. Para mí, contar con el VAR les beneficia, porque así pueden corregir cualquier error que hayan podido cometer, pero lo fundamental es que hagan su trabajo y dejarlos tranquilos. Creo que eso es lo mejor.
- A nivel personal, sabe muy bien qué es la lacra del racismo. ¿Qué se puede hacer para combatirla?
- Hay que luchar para que la gente que va a los estadios no a ver fútbol, sino a hacer otras cosas, no se les permita entrar. Esto es un deporte para que la gente disfrute, para que pueda ir con su familia, con niños, y que todos puedan ver tranquilamente el espectáculo, sin tener que escuchar expresiones racistas ni insultos. Conseguirlo sería muy bueno para el fútbol.
- Usted mismo ha notado miradas desagradables yendo por la calle. ¿Es injusto juzgar a todos por lo que hacen unos pocos?
- Es como todo. Si hay uno que copia en un examen, tú estás al lado sin hacer nada y os castigan a los dos, puedes decir que es injusto, porque no eras tú quien estaba copiando. Cuando de alguna manera te vinculan con cosas con las que nunca te has metido, te fastidia mucho, pero bueno, también hay que tratar de no darle demasiada importancia. Son cosas que pasan en todos lados, en todos los países, y cada uno reacciona a su manera, pero yo creo que la clave es estar siempre muy tranquilo.
- Con vistas al Mundial del año que viene, y viendo que España parece tener muy buenas opciones de hacer algo importante, ¿se arrepiente de haber escogido jugar para Marruecos?
- Sinceramente, en absoluto, no me arrepiento de nada. Yo sentía que tenía que jugar con Marruecos, aunque también podía elegir jugar con España. Si hubiese dudado un poquito, no hubiese dado el sí, porque entonces me estaría mintiendo a mí mismo. Pienso que escogí la opción correcta y, la verdad, estoy muy orgulloso y muy contento de haberla elegido.
